6 de febrero de 2016


Queridos Amigos: hace más de 3 años, que he realizado un parón, motivos muchos, el principal: he tenido un hacker  Que se lo pasó bastante bien. Incluso público  en mi nombre... pero todo ya paso, vuelvo a estar animada, y  espero que después de la desaparición de casi todo lo publicado….

Quiero hablaros de cosas que me gustan, que haga, o que pueden ser de interés, admito  Consejos, sugerencias, críticas constructivas.

Un abrazo

“Disfruta de las cosas pequeñas, e Intenta ser Feliz, aunque sea por momentos”

19 de noviembre de 2012

Huérfanos de los propios hijos



Hay un período en que los padres van quedando huérfanos de sus propios hijos".

Es que los niños crecen independientes de nosotros. Crecen sin pedir permiso a la vida.
Crecen con alegría, y, a veces, con mucha arrogancia.
Pero no crecen todos los días de igual manera. Crecen de repente.
Un día se sientan cerca de tí en la terraza y dicen alguna frase con tal madurez que te sientes que ya no puedes cambiar más los pañales de ese niño.
¿Dónde estuvo creciendo este pequeñito que yo no me di cuenta?
El niño está creciendo en un ritual de obediencia orgánica y desobediencia civil…
Allí están muchos padres al volante, esperando que ellos salgan entusiastas sobre patines y cabellos largos y sueltos.
Entre hamburguesas y bebidas en las esquinas, allá están nuestros hijos con su uniforme de su generación: incómodas mochilas de moda en los hombros.
Allí están, con el pelo desordenado.
Esos son los hijos que conseguimos engendrar y amar, a pesar de los golpes, Y ellos crecen medio amaestrados, observando y aprendiendo con nuestros aciertos y errores.
Principalmente con los errores que esperamos no repitan.
Hay un periodo en que los padres van quedando huérfanos de sus propios hijos.
No los esperaremos más en las puertas de la disco o en las fiestas.  Pasó el tiempo del Ballet, del inglés, de la natación y del Judo. Saldrán del asiento de atrás y pasarán al volante de sus propias vidas.
Debimos haber ido más a la cama de ellos en la noche
Para escuchar su alma respirando, conversaciones y confidencias entre sábanas de infancia.
Y los adolescentes cobertores de aquel dormitorio lleno de adhesivos, posters, agendas coloridas y discos ensordecedores.
No los llevamos lo suficiente al parque.
No les dimos suficientes sandwiches.
No les compramos todos los helados y ropas que hubiéramos gustado de comprarles.
No los dejes crecer sin mostrarles todo tu afecto.
Al principio iban con nosotros donde fueran para la Navidad, vacaciones, a la piscina y con amigos.
había grandes peleas dentro del auto por quien va en la ventana, los pedidos de chicles y las canciones sin fin.
Después llegó el tiempo en que viajar con los padres comenzó a ser un esfuerzo, un sufrimiento, pues era muy difícil separarse de los amigos y los primeros novios.
Los padres quedaron exiliados de los hijos.
Tienen la soledad y tranquilidad que siempre soñaron, pero, de repente morimos de tristeza por extrañar a esas “pestes”.
Llega el momento en que solo nos queda quedarnos lejos de ellos, rezando mucho (en este momento, se reaprende a rezar).
Para que ellos acierten en su búsqueda de felicidad.
Y que la conquisten del modo más completo posible.
Queda esperar:
En cualquier momento nos dan nietos.
El nieto es ahora el objeto de toda nuestra atención, tenemos que recuperar el tiempo,aquel que no tuvimos cuando nuestros hijos fueron niños, nos tocó trabajar , pero ahora tenemos todo el tiempo del mundo...
Por eso los abuelos , sobre todo los que no ejercieron de padres , (se pasaban el día trabajando) ,son tan desmesurados y se exceden con las expresiones de cariño, los mimos, las compras, todos sus caprichos, etc
 Los nietos son nuestra última oportunidad de PLASMAR  nuestro afecto.
Por eso es necesario hacer alguna cosa más, antes de que crezcan.
"Aprendemos a ser hijos después que somos padres…”
“Solo aprendemos a ser padres después que somos abuelos…

Pensamientos en voz Alta


Valoro las cosas no por lo que valen, sino por lo que significan.

SI LA VIDA nos juntó a los dos para crecer Amor contigo yo quiero aprender

Aprendí...que un tropezón no es caída
Aprendí...que todo en la vida vuelve
Aprendí...que no hay mal que por bien no venga
Aprendí...que con VOLUNTAD Y ESFUERZO todo resulta más fácil
Aprendí...que lo más valioso de la vida es la Familia y los verdaderos Amigos
Aprendí...que no se llora a quien No te valora
Aprendí...que por más tropezón, caída, obstáculo, o barrera que se interponga en mi camino, el objetivo es LEVANTAR LA CABEZA y SEGUIR adelante

No llores por el pasado, se ha ido. No te estreses por el futuro, no ha llegado. Vive en el presente y encárgate de hacerlo bello
 —
Vamos a cuidar nuestros pensamientos y lo que sucede dentro de nuestra mente
Enfócate en lo que quieres
BUENA SALUD Y BIENESTAR
Eso es lo que conseguirás
Sin esfuerzo
Muy pronto vas a ver los resultados reflejados en
mejor salud y mayor comprensión de tu proceso
Si te enfocas en lo que no deseas o lo que rechazas,
eso es lo que atraerás hacia tu vida
y tendrás que vivirlo,
porque tú invitaste a la experiencia
con tu pensamiento...

A PESAR DE TODO

(◠‿◠) Sonrío... Aunque la vida me golpee... Aunque no todos los amaneceres sean hermosos... Aunque se cierren las puertas.... Sonrío.

(◕‿◕) Sueño... Porque soñar no cuesta nada y alivia mi pensamiento... Porque quizás mi sueño pueda cumplirse... Porque soñar me hace feliz... Sueño.

(╥_╥) Lloro... Porque llorar purifica mi alma y alivia mi corazón... Porque mi angustia decrece, aunque sólo sea un poco... Porque cada lágrima es un propósito de mejorar mi existencia... Lloro.

(♥ ‿♥) Amo... Porque amar es vivir... Porque si amo, quizás reciba amor... Porque prefiero amar y sufrir, que sufrir por no haber amado nunca... Amo.

(◕‿-) Comparto... Porque al compartir crezco... Porque mis penas, compartidas, disminuyen... Y mis alegrías se duplican... Comparto.
Sonrío, sueño, lloro, amo, comparto... ¡¡¡¡vivo!!!!
 —
Existen personas en nuestras vidas ,que nos hacen felices por la simple casualidad de haberse cruzado en nuestro camino.!!!!

Solo por ser mujeres ya estamos llenas de virtudes, a través de nosotras mismas podemos irradiar amor, ternura y la sutil delicadeza que sin duda un hombre no puede llegar a tener sin nosotras. Recuerda que solo nosotras tenemos el don de traer al mundo una nueva vida y tener la dicha de ser madre, por este motivo jamás permitas una mala actitud contra tu dignidad de mujer... ♥♥

Orgullosa de ser mujer

Mujer de fe, de coraje
Mujer que si tropieza se levanta,
mujer que no necesita de un mástil para salir
adelante,

Mujer que después de llorar, ríe, Mujer que en
vez de odiar, ama; mujer que vibra con lo simple
de la vida,

Mujer que sufre ante el sufrimiento ajeno…
¡Soy feliz siendo Mujer!

Hoy el día se presenta ante mí, esperando a que yo le dé forma y aquí estoy, el escultor que tiene que darle forma. Lo que suceda hoy depende de mí... yo debo escoger qué tipo de día voy a tener.

PARA TI: 
Que los PIES te lleven por el camino más largo hacia la felicidad, porque la felicidad son solo puntos en el mapa de la vida, y el verdadero disfrute está en buscarlos.

Que los OJOS reconozcan la diferencia entre un colibrí y el vuelo que lo sostiene. Aunque se detenga seguirá siendo un colibrí, y es conveniente que sepas, para que no confundas el sol con la luz, ni el cielo con la voz que lo nombra.

Que las MANOS se tiendan generosas en el dar y agradecidas en el recibir, y que su gesto más frecuente sea la caricia para reconfortar a los que te rodean.

Que el OIDO sea tan fiel a la hora del reproche, como debe serlo a la hora del halago, para que puedas mantener el equilibrio en cualquier circunstancia.

Que las RODILLAS te sostengan con firmeza a la altura de tus sueños y se aflojen mansamente cuando llegue el tiempo de descanso.

Que la ESPALDA sea tu mejor soporte y no la carga más pesada.

Que la BOCA refleje la sonrisa que hay adentro, para que sea una ventana del alma y no la vidriera de los dientes.

10 Claves para la Felicidad


10 CLAVES PARA LA FELICIDAD

1. No pierdas nunca el buen humor. De lo contrario, te debilitarás física y psíquicamente.

2. La alegría está dentro de ti. No depende de los demás y tú puedes proporcionártela cada día.

3. No te lamentes. Vive el presente, el hoy, aquí y ahora de cada día. No te encierres en el pasado.

4. Tener más cosas no es ser más. Las posesiones materiales no garantizan la felicidad.

5. Dar es mejor que recibir. Si intentas que la gente que te rodea también sea feliz, tú lo serás más.

6. Vive como piensas. Hay que vivir en paz con uno mismo y siendo consecuente con lo que uno piensa.

7. Olvida lo negativo. Haz cada cierto tiempo un inventario de lo bueno que te ha pasado y olvida lo malo.

8. Lleva una vida saludable. Si estás sano serás fácil que seas feliz. También hay que trabajar la mente.

9. Hazte homenajes de vez en cuando. No pasa nada por darse un capricho, sino que es algo muy saludable.

10. Las crisis son parte de la vida. Hay que aceptarlas y usarlas para fortalecernos y enriquecernos.

5 de mayo de 2012

MADRE ES...UN SER ESPECIAL


MADRE ES ALGUIEN QUE NOS QUIERE Y NOS CUIDA TODOS LOS DIAS DE SU VIDA, Y QUE LLLORA DE EMOCION , PORQUE  UN HIJO SE ACUERDA DE ELLA UNA VEZ AL AÑO-
EL DIA DE LA MADRE!!


Una mujer al ser madre, Dios la llena de instinto maternal, de paciencia, ternura, y dedicacion.

Si no fuera por eso, lo que ella haría al ver a esa criatura minúscula, arrugada y chillona, sería arrojarla a la basura.
Pero gracias al instinto maternal la mira embobada, la encuentra preciosa y se dispone a cuidarla gratis hasta que cumpla por lo menos 21 años.
Ser madre es considerar que es mucho más noble sonar narices y lavar pañales, que terminar los estudios, triunfar en una carrera o mantenerse delgada.
Es ejercer la vocación sin descanso, siempre con la cantaleta de que se laven los dientes, se acuesten temprano, saquen buenas notas, no fumen, tomen leche
Es preocuparse de las vacunas, la limpieza de las orejas, los estudios, las palabrotas, los novios y las novias; sin ofenderse cuando la mandan a callar o le tiran la puerta en las narices, porque no están en nada..
Es quedarse desvelada esperando que vuelva la hija de la fiesta y, cuando llega hacerse la dormida para no fastidiar.
Es temblar cuando el hijo aprende a manejar, anda en moto, se afeita, se enamora, presenta exámenes o le sacan las amígdalas.
Es llorar cuando ve a los niños contentos y apretar los dientes y sonreír cuando los ve sufriendo.
Es servir de niñera, maestra, chofer, cocinera, lavandera, médico, policía, confesor y mecánico, sin cobrar sueldo alguno.
Es entregar su amor y su tiempo sin esperar que se lo agradezcan. Es decir que son cosas de la edad cuando la mandan al carrizo.

El peor defecto que tienen las madres es que se mueren antes de que uno alcance a retribuirles parte de lo que han hecho.
Lo dejan a uno desvalido, culpable e irremisiblemente huérfano.
Por suerte hay una sola. Porque nadie aguantaría el dolor de perderla dos veces.

Mamá:

Hoy quiero darte las gracias por todas aquellas pequeñas cosas que hiciste por mí a lo largo de tu vida...
Gracias... por haberme admitido en tu cuerpo durante 9 meses, por haber compartido conmigo tu espacio, tu aire y tu mundo y por haber soportado valientemente todo el dolor que en su momento implicó para ti darme la vida.
Gracias... por tu tiempo y atenciones mientras fui un bebé indefenso, por tus miles de cuidados, por alimentarme pacientemente cada día.
Gracias... porque a medida que fui creciendo siempre estuviste a mi lado, aun cuando yo no deseaba que estuvieras ahí, por tu útil consejo en los momentos difíciles y por todas las veces que callaste para que yo aprendiera con tu silencio.
Gracias... por enseñarme el amor a la lectura, porque gracias a eso crezco día a día, gracias por tu enorme fe en Dios, por inculcarla en mí desde pequeña, y porque siempre actuaste congruentemente con esa fe, aun en los momentos más difíciles de tu vida.
Gracias... por enseñarme a dar, a compartir, sin importar si la otra persona merecía recibir o no, porque con tu ejemplo aprendí a cuidar de los demás y a procurarles siempre lo mejor. Gracias también por enseñarme a escuchar, a veces eso ayuda más que todo el oro del mundo.
Gracias... por darme tu mano cuando lo necesité, por estar siempre cerca y aun así permitir que tomara mis propias decisiones, mis propios riesgos.
Gracias... por dejarme decidir, por respetar mis decisiones, por estar ahí cuando tuve descalabros.
……..
Hoy me preguntaba qué es una madre, y me puse a pensar en lo que no es, para así poder saber qué es lo que es:
Una madre no es un buzón, pero puede traerte buenas nuevas; una madre no es una caja de seguridad, pero puede guardar un secreto; una madre no es un cofre, pero en ella puedes descubrir un tesoro.
Una madre no es una caja fuerte, pero puede protegerte de los ladrones; una madre no es un arma, pero puede protegerte de muchos peligros; una madre no es un semáforo, pero te puede evitar muchos choques.
Una madre no es un árbol, pero bajo su sombra uno se puede sentir bien cómodo; una madre no es una mascota, pero puede hacerte unos mimos espectaculares; una madre no es una autopista, pero te puede guiar por el mejor camino; una madre no es un auto, pero te puede llevar a muchos lados.
Una madre no es un caramelo, pero te puede endulzar la vida; una madre no es un café, pero te puede acompañar mientras esperas ese resultado; una madre no es un té, pero puede entibiar la vida.
Una madre no es horno de microondas, pero puede recalentarte la comida después de esperarte hasta las 3 de la mañana; una madre no es una heladera, pero puede aguantarte hasta que te pudras; una madre no es una lavadora, pero muchas veces te salva lavándote la ropa 5 minutos antes de que te la pongas.
   A fin de cuentas, una madre no es nada de eso, pero sí me di cuenta qué es lo que sí es:
***Una madre es paciencia, entrega, sacrificio, perdón, compañía, amor, bendición, protección, cuidado, y demás etcéteras que ocuparían muchas páginas de muchos libros; pero lo más importante de todo este discurso es que la madre es un regalo de Dios.

Uno de estos dias....


Uno de estos días
Uno de estos días perderás la paciencia y les gritarás a tus hijos lo siguiente:
-¡Cuándo van a crecer y dejar de actuar como criaturas!
Y la verdad es que lo harán.

Tal vez les grites: -¡Salgan de la casa, vayan afuera a jugar! ¡Procuren no lastimarse y no cierren la puerta tan fuerte!
Y ya no lo harán.
Ordenarás sus dormitorios hasta que todo esté limpio y ordenado, cada cosa estará en su lugar, los juguetes sobre los estantes, los peluches sobre la cama y todas sus ropitas bien colgadas en el ropero. Los llamarás y les dirás:
-Ahora quiero que esto se quede así.    --Y así se quedará.

   **Prepararás la cena perfecta, la ensalada llegará a la mesa en buen estado, sin que les falten las aceitunas. El pastel estará perfecto, sin marcas de deditos en el betún porque lo probaron en la cocina y dirás: - ¡Por fin! Ésta es una comida que se podrá servir a los invitados.
Y comerás sin ellos.
   **Cuando suene el teléfono, gritarás: -¡Que nadie toque el telefono, cuando estoy hablando! Quiero tranquilidad y dejar de gritar... ¿Me escuchais?   Y nadie te va a contestar.

      En tu casa ya no habrá manchas en el mantel de la mesa y ya no habrá un vaso con flores del jardín traídas con un besito. Ya no tendrás que coser los agujeros de los pantalones y nunca más te romperás las uñas tratando de desatar los nudos de los cordones de sus zapatitos.
     Nadie va a entrar en tu casa con lodo en las botas, y van a desaparecer todas esas ligas para atar cabellos que siempre llenaban tu baño. ¡Imagínate! Nadie estará usando tu lápiz labial para escribir por las paredes. Ya no tendrás que buscar una niñera para ir a las fiestas de Año Nuevo.

     No tendrás que asistir a las reuniones de padres en la escuela ni asistir a esas obras donde tu hijo hace el papel de árbol. No tendrás que preocuparte por el transporte escolar, músicas que rompen tus tímpanos o viajes extras al colegio porque tu hijo olvidó su merienda en la casa.
     ¡Imagínate! En Navidad ya no recibirás más regalos hechos de palillos de helados. Se habrán terminado los besitos mojados después del desayuno por la leche que aún tienen en sus labios. Nunca más tendrás que preocuparte por los dientes que caen y los nuevos que tienen que salir.  No escucharás las voces que siguen hablando después de haberse apagado las luces, no tendrás rodillas raspadas que besar, ni deditos sucios que limpiar.
 Sólo habrá una voz diciendo:
     -¿Cuándo será que crecerán y dejarán de actuar como criaturas?
El silencio te responderá: -Ya lo hicieron...

   *Al nacer nos llenan el corazón y el alma... Sólo ellos pueden lograr esa magia. Y luego ¿qué nos pasa?
 De pronto parece que perdemos la paciencia y queremos que crezcan de un día para el otro, de pronto les exigimos que actúen como adultos, nos molesta el desorden, los gritos, las corridas y la vida pasa y ellos crecen y crecen...

     *Nosotros los adultos qué extraños somos... Deseamos un hijo y luego cuando logramos  esa felicidad tan ansiada, cuando logramos tener a ese ser diminuto en nuestros brazos, en vez de bajar a ellos queremos subirlos a nuestra edad.
Si comprendiéramos que cuando un niño llega a un hogar, trae un mensaje que tenemos que descubrir en él día a día, en cada momento, y que al descubrir ese mensaje estamos haciendo renacer nuestro niño interior que tal vez hace años que está adormecido... y pide salir..
.
Tratemos de no contaminar la infancia de nuestros hijos con nuestro sentír,  a veces errado o con nuestras exigencias. Ingresemos en el túnel del tiempo y viajemos hacia nuestros primeros años, recordemos las cosas que nos hicieron felices, las que lograban que riéramos a carcajadas, las que deseábamos repetir porque nos llevábamos por días y días el sabor de ese instante grabado en el alma, en el cuerpo y en la mente.
Borremos una a una las sensaciones que quedaron arraigadas en nosotros que nos lastimaron, que nos hicieron llorar, que nos marcaron a fuego, y luego, cuando volvamos al presente, a este instante, miremos a nuestros hijos y pensemos en sus sentimientos, en sus deseos...

Tratemos de darles lo mejor de nosotros, tratemos de fortalecer en ellos todo lo que en el futuro les permita ser mejores personas. Eduquemos desde el amor y el respeto.


 De nada sirven los cuartos ordenados, la ropa limpia, la mesa llena, los platos bien servidos, los pisos impecables , si no logramos que nuestros hijos sepan el verdadero sentido de la felicidad, y la felicidad no está en nada de eso, sólo podemos encontrarla en esos corazones que tenemos la obligación de proteger, cuidar y resguardar del dolor, de la injusticia, del desamor.

Por eso estamos a tiempo de correr con nuestros hijos, aunque se nos arruinen los zapatos, éstos se pueden reponer, se pueden volver a comprar... Todo lo material puede reponerse, en cambio la infancia pasa de pronto como una gaviota en el mar, y cuando queremos volver a sentir esa magia ya no podemos volver atrás.

Mamá... Papá... Agradece a la vida los gritos, a veces los llantos, los berrinches, las marcas de acuarela o de pintura, la tarta en la que se dibuja un dedo aunque no sea presentable.
Agradece a la vida que ese pequeño está a tu lado y que toma tu mano con fuerza, no te detengas, camina con él, deja que te hable y permítele que te cuente sus historias de ángeles y de soldados, de arañas enormes y de duendes fantásticos y siéntate a su lado a compartir su plato favorito, su dibujo más amado... y deja que te lleve a caminar por el camino de su inocencia, de su amor a todo, de sus sueños: vuelve a ser niño junto a él...

No te pierdas ni un instante de ese mágico momento...


¿QUE HICISTE HOY?


¿Qué hiciste hoy?


Mi esposo llegó hoy a la casa y me vio sentada en el sofá con nuestro pequeño en una rodilla, y amamantando a nuestro bebé del otro lado.

Estaba tratando de voltear las páginas de un libro con la mano que no sostenía al bebé, mientras atendía a ver si oía el sonido de la alarma de la cocina que me indicaría si las costillas de cerdo estaban ya en el punto entre "bien cocidas" o "al perro le toca la entrada del menú de hoy".

Mi esposo me miró inocentemente, y preguntó:

-Y bien, ¿hiciste algo el día de hoy?

Es bueno que la mayoría de mis apéndices estaban ocupados, pues así no pude saltar sobre él y estrangularlo hasta matarlo. Probablemente esto fue lo mejor, ya que asumo que hacer una pregunta estúpida, no justifica el asesinato en este país.

Déjame retroceder un poco y explicarte lo que me llevó a este punto en mi vida.

No siempre estuve al borde de la locura. Al contrario, hace apenas cuatro años, yo tenía un buen trabajo, un ingreso estable, y un vehículo en el cual no cabía más que un equipo profesional de deportes, además de mí.

Yo veía shows de televisión cuyos anfitriones no eran marionetas. Me iba a dormir después de las nueve de la noche, y prefería el sexo a quedarme dormida.

Me reía de las personas que viajaban en un remolque con tres niños gritando y un perro babeando, y le llamaban a esto "vacaciones". Pues bien, ¡me he convertido en una de esas personas! ¿Qué me sucedió? La prueba de embarazo resultó positiva. He cambiado mi lencería de "Victoria's Secrets" por pantaletas de algodón y unos buenos brassieres de maternidad. Adiós, Luis Miguel. Hola, Cri-Cri y las Ardillitas.

Mi idea de privacidad ahora es poder ir al baño sin que un niño de dos años esté afuera golpeando la puerta, mientras un bebé esté descolgando todo el papel de baño desde mi regazo.

Y, finalmente entendí que el término: "Mamá que se queda en casa", no se refiere a una madre que ya no trabaja fuera de casa, sino más bien a una que parece que nunca tiene la oportunidad de asomar la nariz por la puerta.

Así que heme aquí sentada, con mis niños cargados, tratando de contestar a mi amado esposo.

¿Que si hice "algo" hoy? Bueno, pues creo que sí, pese a que parece que no mucho fue logrado:

Compartí el desayuno en la cama con un apuesto joven. Por supuesto, el desayuno consistió en un platito de avena y de migajas de galleta halladas entre las sábanas. El apuesto joven mide noventa centímetros, y sólo se excita cuando ve dinosaurios color púrpura, camioncitos de juguete, y papitas a la francesa.

También me fui a dar un paseo relajante por el bosque. Por supuesto, tuve que buscar ranas y lagartijas, y detenerme a soplar algunos "dientes de león" en el camino. Lavé también exitosamente una carga de ropa, moví la ropa de la lavadora a la secadora, y la carga que estaba en la secadora fue pasada a la canasta. La ropa de la canasta está ahora extendida en la cama, esperando mi decisión, a la hora de ir a la cama, de guardar esa ropa o de simplemente moverla a mi tocador.

Leí dos o tres clásicos, por supuesto, Dickens y Shakespeare no son los autores, pues ahora estamos en los trabajos de Andersen, Grimm y otros autores de cuentos de hadas. Creo que no estaré en la sección de adultos de mi librería en mucho tiempo.

En los ratos libres, barrí, sacudí, limpié, organicé y reacomodé. Alivié golpes con besos, y enjugué las lágrimas. Regañé, alabé, abracé, y puse a prueba mi paciencia, todo ello antes de la tarde.

¿Que si hice "algo" hoy?

¡Ya lo creo! Ahora ya entiendo lo que la gente quiere decir cuando se menciona que la paternidad es el trabajo más difícil de su vida.

En mi VAP (Vida Antes de los Pañales), yo enseñaba a mentes jóvenes cómo dividir fracciones y escribir complejas oraciones; pero ahora soy incapaz de enseñar a un testarudo de dos años cómo usar el baño.

Alguna vez fui capaz de manejar por complicadas calles urbanas, mientras hablaba en mi celular y buscaba al mismo tiempo una buena estación de radio; ahora no puedo hacer que las rueditas de mi carrito vayan en la dirección que necesito.

Soy graduada universitaria, he escrito artículos en el periódico, he ganado premios, pero no encuentro cómo quitar las manchas de zanahoria de mi alfombra.

Antes, debatía sobre política con mis amigos; ahora hablamos de las ventajas de pañales desechables contra pañales de tela.

¿Y cuándo dejé de usar oraciones de más de cinco palabras?

Así que, en respuesta a la pregunta de mi esposo, dije:

"Sí hice algo hoy. De hecho, he dado un paso más hacia uno de los mayores logros en la vida.
No, no curé el Sida, ni contribuí a pactar la paz mundial, pero sí sostuve un milagro en mis brazos.
Dos, de hecho. Mis niños son mi mayor logro, y la oportunidad de criarlos es mi mayor reto. No sé si mis hijos crecerán para convertirse en grandes líderes o en neurocirujanos de nivel internacional. Francamente, no me importa, siempre y cuando crezcan para ser buenas personas. Ellos son mis mayores alegrías, pese a que muchas veces por la noche me quedo dormida llorando de frustración.
El punto es, que hoy pude ver a mis hijos dar otro paso en el gran viaje de la vida, y tuve la oportunidad de mostrarles algunas de las partes del camino".

Así como la paternidad es todo un reto, es compensatoria en la misma medida. Porque estamos usando todos nuestros conocimientos, nuestro talento y nuestras habilidades para formar a una nueva persona. Es esta persona, y esta gente, la que a su vez usará sus dones para construir nuestro futuro. Así que cada canción de cuna que yo canto, cada columpio que empujo, cada manita que sostengo es algo, y... ¡lo hice hoy!